Más sobre velos: Clases de coreografía.

Que yo sepa, el baile con velo casi siempre está cuidadosamente coreografiado.

Hay dos formas principales de bailar con velo: la clásica, a lo egipcio, que no tiene más de unos 70 años, es usar el velo para hacer una entrada breve, un "aquí estoy yo, mira qué monísima vengo", dar una vueltecita al escenario, soltar el velo de mala manera, y entonces empezar a bailar de verdad. Imprescindible la pose Delicada Ninfa del Nilo: coqueta, pero no sexy. Segura, pero sin imponer.

La segunda forma es a la americana, o al estilo occidental, si lo prefieres: coreografía con velo de principio a fin. A cada profesora o coreógrafa le gusta hacer algo un poco diferente. El velo puede ser un instrumento en sí mismo para movimientos que no pueden hacerse sin él, o puede ser un fluorescente que subraye tus movimientos. Una buena coreografía incluye las dos cosas.

Algunos movimientos especiales de velo son las vueltas con el velo ondeando por detrás o alrededor, lanzar el velo adelante y hacer que retroceda cayendo sobre ti, o las diferentes modalidades de "sobre": Se coge el velo, te envuelves en él elegantemente, quedas toda escondida, vuelves a salir. Parece muy difícil, pero no lo es. He visto también bailarinas que se envolvían en el velo como si fuera ropa, como un sari, y se lo ponían y quitaban seductoramente. Puede quedar bonito, aunque a mí no me gusta hacerlo yo.

Usar el velo para acentuar movimientos tiene muchas posibilidades. Colocado sobre los brazos desvía las miradas, semioculta detrás de él en perfil tres cuartos puedes hacer cualquier movimiento de cadera y que parezca especial. Eso sí, es muy importante recordar en todo momento llevar lor brazos redondeados y elegantes. El velo pesa, pesa un montón, y enseguida empiezas a sostenerlo como la que lleva las bolsas de la compra. Creo que si procuras llevar brazos elegantes, todo lo demás saldrá solo. No intentes controlar el velo: controla los brazos, y el velo se llevará estupendamente contigo.